Inicio Estatal «Ayúdame, Dios mío, ayúdame»: Hijo de Elvia narra el momento del ataque

«Ayúdame, Dios mío, ayúdame»: Hijo de Elvia narra el momento del ataque

86

Ciudad Obregón.- “Ayúdame, Dios mío, ayúdame», repetía una y otra vez Elvia Ochoa cuando llegó su hija al negocio donde había sido golpeada con un bat por un presunto delincuente, detenido por policías investigadores cuando trataba de huir.

Raúl Fernando González Ochoa, el mayor de los tres hijos de Elvia Ochoa, entre lágrimas y con la voz quebrada, platicó que desde el pasado jueves, día que sucediera el incidente, él y su familia han pasado por momentos muy difíciles.

“ A mi mamá la encontraron agonizando unos clientes, fueron ellos los que llamaron a emergencias y avisaron a mi hermana, cuando ella llegó al negocio la encontró todavía consiente y hablando, repetía una y otra vez ayúdame, Dios mío, ayúdame”

Yo vivo en Tijuana y me encontraba manejando de regreso a mi casa del trabajo cuando recibí la llamada de mi cuñado para avisarme que mi mamá había sufrido un accidente y estaba en terapia intensiva, pero nunca me imaginé de la gravedad de la situación hasta que vi el vídeo en redes sociales.

“Estaba buscando vuelo para irme a Navojoa, cuando me habló un amigo que conoce a mi mamá para avisarme que estaba circulando un vídeo en redes muy fuerte del incidente, al momento de verlo me sentí de lo peor, mi corazón se marchitó y nació un gran coraje en mi cabeza, pensé que mi mamá no lo lograría ¡fue horrible!”, abundó.

Mi mamá tiene muchas ganas de vivir, va mejorando a paso veloz, aunque su condición tardará en mejorar completamente por que continua con inflamación de cerebro, las tomografías van mostrando mejoría y los doctores nos han dicho que aunque se sigue considerando su estado de salud como grave, está estable.

Respira sin aparatos y ha mostrado reacciones en brazos y piernas, su cerebro poco a poco se esta acomodando de nuevo donde debe, por que con el golpe y la inflamación se había deformado.

“La parte de cráneo donde recibió el batazo, se fracturó en muchas partes y por esos huecos su cerebro empezó a salir por la inflamación, lo que hicieron los doctores en la operación es que abrieron un hueco más grande para dar espacio a que el cerebro volviera a su tamaño normal sin complicaciones”, subrayó.

Enfatizó que la deuda con el hospital privado de Navojoa es muy alta y que solo pagaron una parte para que pudieran trasladar a su mamá, pero aún les restan pagares por liquidar.

La gente ha sido muy solidaria y buena con la familia, puntualizó, nos han brindado mucho apoyo, por muchos medios, sus cadenas de oración han sido muy poderosas, mi madre es un milagro.

Con información de El Imparcial