Monterrey, Nuevo León.- El presunto secuestrador y asesino del bebé Decker Alexander, quien además mató al padre del menor a martillazos, podría alcanzar casi 200 años de prisión según estimaciones previas de la Fiscalía General del Estado.
Tras la captura en Ramos Arizpe de Mario ‘N’, el Vicefiscal Luis Enrique Orozco dijo esta mañana que aún está por determinarse la forma en que falleció el bebé de tres meses, lo que será determinante en la imputación ante el juez.
«Son distintos los hechos por los que se obtuvo la orden de aprehensión», dijo.
«Hay robo calificado con violencia que tiene una penalidad de cinco años; por homicidio calificado, con una penalidad de hasta 50 años; y por secuestro agravado que tiene una penalidad de hasta 100 años.
«Todavía no es el momento de confirmar que el bebé que se encontró fallecido es el mismo que él sustrajo, y en caso de confirmarse qué es el bebé, y que fue privado de la vida por este individuo, se habría de replantear la acusación y la pena, por ese solo hecho podría ser de hasta 140 años».
Orozco confirmó que los signos físicos del cuerpo del bebé denotan una posible asfixia, pero aún no se tienen los resultados de la autopsia.
Relató que, luego de asesinar al padre del menor y dejar atada a su madre la madrugada del sábado, López Razo acudió a su trabajo a cobrar, y de ahí emprendió la huida hacia Coahuila.
«Después de haber ejecutado este hecho en la madrugada del día sábado, acudió a su centro de trabajo para pedir el cobro de su salario aludiendo la necesidad de dinero con motivo de la descompostura de su vehículo», dijo el Vicefiscal.
«Se evadió de aquí del estado de Nuevo León, sabíamos por información que la ciudadanía nos dio que probablemente se encontraba en Saltillo o Ramos Arizpe, y finalmente fue localizado y detenido con apoyo de autoridades de ese Estado».