Michoacán.- Se viralizó en redes sociales la imagen de una artesana purépecha triste después de que no logró vender las servilletas que borda, a pesar de que las vende a menos de 50 pesos.
El mercado de los artesanos suele ser desplazado por los productos industriales e importados, que además de que se encuentran en cualquier comercio y grandes plazas cuentan con mayor publicidad y elementos visuales como empaques o etiquetas.
Doña Adela, la mujer que fue captada triste en una escalera junto a sus servilletas, es originaria de Turícuaro, y lleva sus artesanías en Michoacán, Uruapan y San Juan Nuevo Parangaricutiro para lograr vender lo suficiente para sobrevivir.
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Un artesano que continúa con la labor artesanal, continúa también con la tradición que sus padres o familiares le legaron. Por lo que no lograr vender los productos que ha hecho su familia, causan una profunda tristeza en Adela, como en muchos otros artesanos.
Las artesanías llegan a representar la esencia cultural de un país, una comunidad o una región, sin embargo, al compararlos con productos industriales muchas veces se suele preferir los comerciales.
El trabajo de un artesano se diferencia de los productos industriales o seriados porque además de que son únicos y normalmente hechos a mano, tienen una tradición, por lo que normalmente se relacionan a una cultura en particular y suelen ser particulares de una región.
