Nuevo Laredo, Tamaulipas.- De nueva cuenta esta ciudad fronteriza estalló en eventos de violencia extrema, con repetidas balaceras como consecuencia de enfrentamientos entre grupos de la delincuencia organizada e integrantes de cuerpos policiacos y militares, con saldo total de siete muertos, entre ellos un soldado.
Fuentes oficiales mencionaron que los hechos ocurrieron en plena tarde y en horas de la noche, por lo que los habitantes de Nuevo Laredo se encerraron en sus casas y no quisieron saber nada de actividades en la calle.
En las escuelas, aquellas de turno vespertino, se llevaron a efecto las prácticas de permanecer en las aulas y recostados sobre el piso, en espera de que terminara la “trakatera”.
Fueron tres puntos de la ciudad donde los delincuentes hicieron frente a las fuerzas policiacas y militares; ahí quedaron los cuerpos sin vida de seis pistoleros y un elemento del Ejército Mexicano; hay además dos delincuentes heridos.
Consecuencia de estos hechos, numerosos vehículos policiacos, militares, así como de civiles y de los que usaban los delincuentes, resultaron afectados con impactos de proyectiles disparados por armas de fuego.
