Guaymas, Sonora.- La pequeña Isabelle Valenzuela, a sus apenas ocho años de edad, ya es una “niña grande” que sabe de retos y que cuando se lo dispone los alcanza, como fue su sueño de escalar el emblemático cerro de la Comisaría de san Carlos Nuevo Guaymas, el Tetas de Cabra, y llegar hasta la cima.
Para ella fue una experiencia formidable, un reto que se impuso y alcanzó este fin de semana, acompañada de sus padres y otras personas, en un grupo con experiencia en este tipo de excursiones.
César Valenzuela nos cuenta que la aventura inició a las siete de la mañana y lograron alcanzar la cima del Tetas de Cabra una hora y media después, previa escala a la mitad del camino ascendente, donde la niña se sintió momentáneamente mal, pero se repuso.
La historia que nos ocupa comenzó así, según nos cuenta César: “Un día mi esposa y yo dijimos: Vamos a subir el cerro Tetas de Cabra, y mi hija escuchó y nos dijo ‘yo quiero ir’; le respondí estás segura que quieres ir’, y me dijo que sí, te vamos a llevar, le comenté”.
https://www.facebook.com/opinionsonora/posts/2744056488981205
Agrega que “así la llevaron y a la mitad del camino Isabelle empezó a vomitar, se sintió mal, y le dije que tendríamos que regresar, ‘no, espérate papá, déjame descansar y tomar agua’; al rato dijo que ya se sentía bien”, y siguieron la escalada, hasta llegar a la cima del imponente cerro, símbolo de este destino turístico.
Feliz de ver cumplido su sueño y reto de subir el Tetas de Cabra, que siempre lo miraba desde abajo, Isabelle bajó del mismo sin dejar de sonreír y lista para contar a sus amigos la experiencia vivida.
Escalar este cerro es parte del atractivo que atrae año con año a más turistas a este destino de playa, significa una experiencia maravillosa cuando se toman las precauciones debidas y se evitan riesgos, como fue el caso de la familia y acompañantes de Isabelle.
