Guaymas, Sonora.- Al decretarse la contingencia sanitaria por el COVID-19, en el mes de marzo de este año, numerosos negocios se fueron al cierre obligatorio, como fue el caso de los expendios de cerveza, la mayoría de ellos propiedad de las mismas firmas cerveceras, perro operados por personas con la figura de comisionistas.
El caso es que tras aquel cierre y luego el decreto de alto total a la fabricación de cerveza, por considerarse una actividad no esencial, la inactividad de este tipo de negocios ha colocado en serios aprietos económicos a los referidos comisionistas.
Hoy su futuro es incierto, ya hay fabricación y venta del producto en Oxxo’s, agencias cerveceras y supermercados, pero los expendios no los han reabierto, sin explicación lógica alguna.
El argumento es que el horario está limitado, pero para algunos comisionistas ello solo es un pretexto, y no ven el día de que puedan reactivarse.
