Inicio Estatal VIDEO: Se roban la arena de una playa de San Carlos para...

VIDEO: Se roban la arena de una playa de San Carlos para un domicilio particular

997

Guaymas, Sonora.- Este martes varios guaymense reportaron la extracción ilegal de arena en una de las paradisiacas playas de San Carlos Nuevo Guaymas, Sonora, siendo en el fraccionamiento Costa Diamante de Playa Blanca, donde captaron a una retroexcavadora utilizan la arena para una construcción particular.

Por ello guaymense solicitan la intervención de la Procuradoría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), para el cumplimiento de la ley.

ANTECEDENTES

Cabe señalar que en esta zona no es la primera vez que se reportan este tipo de hecho, ya que particular en diversas ocasiones han intentado cerrar el acceso a las playas, así como también invadir en zonas federales públicas.

Se estima que entre el 75% al 90% de las playas del mundo se están reduciendo debido al tráfico y explotación de arena.

Aumento de la erosión, destrucción de los hábitats, degradación de los fondos marinos y un largo etcétera son consecuencias derivadas a raíz de la problemática de la extracción y venta de arena extraída de Quintana Roo de manera ilegal.

Entre enero y mayo de este año, se calcula que al menos 120 toneladas de arena fueron robadas de las playas de Quintana Roo para ser traficadas ilegalmente a Estados Unidos. Estas arenas hurtadas, de acuerdo con una serie de denuncias presentadas ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), también se han destinado para rellenar el frente de los complejos hoteleros.

Hay actores políticos que muestran su consternación ante estos hechos, como el Senador Manuel Añorve Baños del estado de Guerrero, quien ha mostrado su compromiso con el cuidado del medio ambiente a través de su participación en la aprobación de un dictamen para reforzar la vigilancia, que las denuncias por robo de arena se atiendan, y este delito no quede impune ni siga sucediendo.

Las zonas más afectadas de donde se han extraído cantidades importantes de arena se encuentran en el conjunto condominal Puerto Cancún. Estas playas se encuentran a 14 km de las ruinas de Tulum, Punta Cocos, en Holbox y en la zona continental de Isla Mujeres, cerca de Isla Blanca.

Se estima que de las ventas de este recurso natural se han obtenido ingresos de al menos 2.3 millones de dólares, y decimos ‘al menos’ puesto que la cifra se calcula mayor, ya que las organizaciones que levantan las denuncias, entre las que se incluye Vida Verde Quintana Roo, aseguran que sólo se tiene conciencia del 10% de estas extracciones. Es impresionante el hecho de que basta con ingresar a una tienda en línea para buscar arena y ver las diferentes ofertas disponibles en el mercado.

Según un informe de la Organización Internacional Union of Geological Sciences, el tráfico mundial de arena ronda en los 18 mil millones de toneladas, cantidad que supera al petróleo, cuyo consumo se calcula en 3 mil 400 millones de toneladas. Pero, ¿por qué robar arena y venderla? Resulta que la arena se ha hecho imprescindible en la actividad industrial, desde la construcción hasta el sector tecnológico.

Las consecuencias para el medio ambiente son irreversibles y causarán el aumento de la erosión, la destrucción de los hábitats de aves migratorias como el charrán mínimo, la degradación de los fondos marinos, el incremento de materiales en suspensión, y graves problemas para que la anidación de las especies de tortuga verde (chelonia mydas) y caguama (caretta caretta), pueda llevarse a cabo, ambas especies catalogadas en peligro de extinción.

FIN A LA EXTRACCIÓN DE ARENA

Para poder dar fin a este grave delito, senadores y diputados de todas las bancadas partidistas de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, aprobaron el dictamen con punto de acuerdo para que el gobierno del Estado, autoridades federales y las administraciones municipales refuercen cuanto antes la vigilancia y que las denuncias pendientes por el robo de arena en Quintana Roo sean atendidas en tiempo y forma.

Así, las instancias gubernamentales correspondientes tendrán la labor de investigar la extracción ilegal de arena en las playas y dunas en las costas nacionales e informar al poder legislativo federal las medidas implementadas para combatir el hurto de este mineral tan esencial para la supervivencia de este ecosistema.

Dicho dictamen explica que la Profepa recibió, entre 2013 y 2018, 89 denuncias por extracción o explotación ilegal de arena en México; en algunos casos, la extracción llevó a la modificación de los ecosistemas, pues el tráfico de arena es una práctica silenciosa, pero con un alto impacto ambiental.

«No somos conscientes del efecto cascada que esta degradación tiene en nuestro bienestar», advierte la bióloga mexicana Rebeca León Castro «la sobreexplotación de arena se ha asociado con un aumento de inundaciones, vulnerabilidad frente a tormentas o a la proliferación de enfermedades infecciosas. También puede expulsar a la flora y la fauna endémica».

PRÁCTICA ILEGAL

Hace más de dos años se reportó sobre la práctica ilegal de robar arena para el sector inmobiliario; ya que hoy es una realidad en México.

Tan sólo en 5 años, entre 2013 y 2018, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) registró 89 denuncias por extracción o explotación de arena en México; en algunas casos, la extracción llevó a la modificación de ecosistemas.

Y esto es sólo de los que se tienen registro, y aunque la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) sólo tiene autorización de tres concesiones de extracción de arena en playas, la realidad es que el tráfico de arena es una práctica silenciosa pero con un alto impacto ambiental.

Jalisco, Oaxaca y Chiapas encabezan la lista, pero Sonora no se queda atrás ya que también tiene varios reportes de daños al ecosistema.

La revista Obras abordó el tema del robo de arena en playas mexicanas y ejemplificó el caso de las playas de Baja California Sur, donde el precio por un metro cúbico de arena es de $200 pesos, esto es realmente una falta de conciencia; en primer lugar porque es u delito y en segundo por que el precio tan ínfimo que hace que conseguir arena sea bastante lucrativo para quien lo extrae como quien lo adquiere como las empresas inmobiliarias.

“…Es ‘casi irrisorio, en el mercado, su valor escala fácilmente; en especial, si es para exportación. En Estados Unidos se duplica o triplica el precio; es muy rentable…», advierte Saúl Chávez, del Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste (Cibnor)

La extracción de arena se da desde el robo hormiga en pequeñas cantidades hasta los robos a nivel industrial. “…Hay poco registro, pero sabemos que se hace…”, dice Rodolfo Silva Casarín, del Departamento de Ingeniería de Costas de la UNAM.

“…En el Caribe, donde se tienen desarrollos muy importantes, si tu playa no es bonita como para la explotación turística, buscas cómo mejorarla. Me ha tocado ver hoteles que tienen su propia bomba de extracción. El problema, asegura, es que nadie vigila. México cuenta con cerca de 11,500 km de playa, y en zonas menos turísticas el control desaparece…”, aseguró Casarín.

La arena, junto con la grava y roca, es de los materiales con mayor extracción en el mundo para la construcción y por ser un recurso tan ‘disponible’ y de fácil extracción o robo, está dejando un gran problema detrás de sí.

Se necesitan alrededor de 200 toneladas de arena para hacer una casa de tamaño mediano; 1 kilómetro de carretera requiere 30 mil toneladas o una planta nuclear cerca de 12 millones de toneladas… en sí son cantidades exorbitantes las que se emplean para la construcción.

Recientemente el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) publicó en un informe que el consumo mundial anual de arena y grava supera las 40 mil millones de toneladas.

«…La arena es un recurso fósil que se forma lentamente y nosotros nos lo estamos acabando de forma acelerada. Estamos usando mucho más que lo que se consideraría justo, estamos usando arena como si sólo fuera para nuestra comodidad y conveniencia…”, dijo Kiran Pereira, quien fundó sandstories.org para crear conciencia sobre el tema.

Existen métodos que se están empleando para extraer la arena que son perjudiciales para el medio ambiente, como el uso de barcazas de draga de succión, que actúan como aspiradoras gigantes para absorber la arena del fondo del océano en aguas poco profundas.

“…Todo lo que bombea una de estas aspiradoras gigantes está esencialmente muerto. Hay estudios que muestran que los hábitats de arena no se recuperan en absoluto después de haber pasado por esto…», dijo Kim Detloff, jefe de conservación marina de la Unión para la Conservación de la Naturaleza y la Biodiversidad (NABU) en Alemania.

Esta práctica conduce a una erosión costera. Si se extrae una cantidad importante de arena puede hacer que la playa se deslice hacia el océano, sin dejar nada atrás que pueda proteger la orilla contra la fuerza de las olas.

Pero no todo el sector inmobiliario es culpable / responsable: diferentes actores de la construcción se han mostrado preocupados por los escasos recursos que el nuevo gobierno destinará a infraestructura.