Guaymas, Sonora. El suministro de agua potable, con una distribución efectiva, es el clamor generalizado entre la ciudadanía de este municipio, que por décadas ha sufrido la falta de este vital elemento en sus tomas domiciliarias; hasta la fecha las autoridades no han dado solución a este problema.
En la década de los 90’s, cuando se construyó el acueducto Río Yaqui, autorizado por el entonces presidente de la República, Carlos Salinas de Gortari, se pensó que aquello sería cosa del pasado, pero antes de llegar al siguiente milenio los guaymenses se dieron cuenta que no sería así.
Esta falta de agua potable ha sido por siempre el freno que ha tenido la región para su desarrollo económico, salvo la industria manufacturera, cuya demanda de agua es mínima.
PROTESTAS
Como el problema de abasto se ha incrementado en el último mes, casi a diario hay protestas de la población, con bloqueo de vialidades, que generan aún más el enojo de la población.
Al mediodía de este viernes, hartos de no contar con este servicio en las últimas tres semanas, vecinos de la colonia San Vicente decidieron bloquear el paso vehicular en el bulevar Pedro G. Moreno.
Estuvieron por algún tempo en el lugar, hasta que una cuadrilla de la Comisión Estatal del Agua (CEA) llegó al lugar para abrir las válvulas de distribución a ese sector, pero “castigando” a otras colonias.
Esto, amigos lectores, es el cuento de nunca acabar, es un problema que persiste y que no se vislumbra solución.