Hermosillo, Sonora.- Una familia mexicoamericana de nueve integrantes fue aislada y vacunada, junto a sus 10 mascotas, luego de que autoridades sanitarias confirmaran mediante pruebas de laboratorio que un zorro gris infectó con la rabia a su perro de raza Husky doméstico, en la costa de Hermosillo, Sonora.
El contagio ocurrió entre diciembre y enero, en la comunidad porteña de Bahía de Kino, cuando la familia Crutchfield notó cambios en el humor en una de sus 10 mascotas, un perro Husky que convivía con otros perros Pugs y nueve personas en un predio con varios domicilios.
Yésica Guadalupe Pacheco Guillen recordó que el pasado 4 de enero, «Lucky» atacó a su suegra Pamela Crutchfield a mordidas en un brazo, lo que desencadenó la preocupación por una posible infección.
«Fue el principal síntoma de la perra (ferocidad), muy extraño porque era muy noble, nunca había atacado a nadie, ni a los niños, perros ni nada, se aisló a la perra y a los dos días buscamos la vacuna porque la perra presentaba más síntomas, actuaba nerviosa y muy perdida de su mirada, tomaba mucha agua, aunque muchos tienen la creencia de que sacan espuma y no toman agua, pero no es cierto», dijo Pacheco.
A la perra «Lucky» de raza Husky, la Secretaría de Salud en Sonora le tomó muestras que fueron analizadas en un laboratorio en los Estados Unidos, donde el resultado arrojó positivo a la caracterización antigénica identificada de la variante V7, un tipo de rabia asociado al zorro gris endémico a la región desértica en el noroeste de México.
«Nos dan la noticia de que dio positivo a la rabia, fue un golpe muy duro para nosotros, mucho miedo, mi suegra estaba muy asustada, pero ya había empezado por sus vacunas, ese mismo día vienen por la perrita muerta, vacunan a todos los perros de la casa y también vacunan a los niños que habían estado más expuestos», agregó Pacheco.
Carolina Araiza, directora general de Protección y Bienestar Animal en el Gobierno de Sonora, reconoció que la sobrepoblación canina y felina es un problema que ha aquejado al estado mexicano al noroeste del país desde hace muchos años, ante la falta de aplicación de políticas públicas.
Actualmente, la Secretaría de Salud de dicha entidad mantiene la vigilancia epidemiológica sobre los nueve miembros de la familia Crutchfield; además de una decena de mascotas en su propiedad en Bahía de Kino.
Asimismo, las autoridades anunciaron campañas de vacunación masivas en Hermosillo, la costa y zona rural por este acontecimiento.