Coahuila.- Los casos de abuso predominan en diferentes partes de México y el mundo, donde se presentan situaciones que dejan sin habla a los internautas. Un ejemplo de esto es el infierno por parte de sus compañeros que vivió un niño de once años con discapacidad.
El terror se desató cuando el menor de edad se encontraba en la escuela y fue abusado por dos compañeros de la primaria Revolución 1910 ubicada en la ciudad de Saltillo.
El niño, identificado como Rodrigo, aseguró que no tuvo la oportunidad de defenderse ante los embates de dos de sus compañeros, quienes ingresaron sus dedos en su cuerpo sin piedad.
La familia no se enteró de lo ocurrido el día del abuso debido a que el pequeño Rodrigo presenta problemas de habla.
La abuela fue la primera en notar algo raro en el menor, ya que fue al filo de las 19:00 horas cuando el pequeño lloró de dolor en su zona íntima y en ese momento los familiares constataron la terrible noticia.
Rodrigo explicó como pudo que dos de sus compañeros le metieron los dedos y al verificar el cuerpo de su hijo, los padres vieron que había sangre y además defecó sin controlarlo.
La furia se desató y la familia de Rodrigo visitó la escuela, comenzando con el reclamo a la directora, quien no estaba consciente del acto de abuso que se registró en su institución educativa.
La abuelita de Rodrigo alertó al 911 para pedir auxilio, por lo que los agentes llegaron a la escuela y comenzaron con las averiguaciones correspondientes.
La directora de la institución no brindó más datos sobre los menores que cometieron el abuso; sin embargo, la Policía ya tomó cartas en el asunto para esclarecer el acto e imputar una sanción a los atacantes de Rodrigo.
