Vadym Demedyuk, un niño ucraniano de 9 años, agoniza de dolor diariamente. El 99% del cuerpo de este niño está cubierto por eccemas causados por la grave psoriasis con la que vive desde hace seis años, según el diario Clarín.
La psoriasis es una enfermedad de la piel que acelera el ciclo de vida de las células cutáneas. Se acumulan rápidamente en la superficie de la piel formando escamas y manchas rojas. En el caso de Vadym, la enfermedad le causa heridas sangrantes, un picor agónico y unos dolores que hacen que, según relata su madre, Natalia Pilat, “a menudo no pueda caminar y cada movimiento sea insoportable”.
Durante los últimos seis años, la familia del niño ha buscado ayuda médica en toda Ucrania. Según la progenitora, los médicos repiten que “es uno de los casos más extremos que han visto”, pero no encuentran la solución. Los expertos que han atendido el caso han acabado renunciando a él después de haber probado distintos tratamientos.
“Hemos probado cremas y medicamentos y nada ha ayudado”, explica la madre. Todas las opciones han resultado inútiles y Vadym ha confesado a su familia: “Prefiero morir que seguir viviendo así”.
Según Natalia, su hijo desea poder ir a la escuela, pero sus condiciones no se lo permiten. “No quiere que lo miren y lo señalen. Mi hijo no tiene amigos y se siente socialmente incómodo”.
Una posible solución
Los padres de Vadym han decidido explorar otras alternativas fuera de su país natal. Recientemente han encontrado una clínica dermatológica en Israel donde están dispuestos a tratar al pequeño. Para pagar el costoso tratamiento, una ONG ucraniana ha ayudado a la familia a recaudar más de 50.000 euros.
