Mazatlán.- Danna Gisela Olivares cumplió 12 años. Al apagar las velitas de su pastel pidió a Dios que no le amputen la pierna y recuperar su salud.
Quiero vivir, seguir estudiando, disfrutar a mis hermanos, mis padres, familia y mis amigos, recalcó Danna.
La menor padece osteosarcoma. En julio del año pasado le salió una bolita en la pierna que le causaba molestia. La revisaron varios médicos pero el dolor no cedía. La llevaron a un especialista que la alertó de un posible tumor.
La canalizaron al hospital general de Mazatlán y confirmaron el diagnóstico. Después la trasladaron al Pediátrico de Culiacán.
Tras confirmar que se trataba de cáncer en los huesos, el 14 de noviembre pasado inició sus sesiones de quimioterapia. La enfermedad avanzo al pulmón y la cadera.
El 15 de enero, el médico les indicó que la única opción era amputar la pierna, explicó Maribel Díaz, madre de la menor.
La mujer hace una pausa para secar sus lágrimas y aún con la voz entrecortada comenta: “Mi niña, que apenas empieza a vivir, no puede perder la pierna, ni su vida”.
Añadió que como madre no se podía quedar cruzada de brazos y buscó otras opciones. Un especialista del hospital civil le habló de una cirugía para cortar el hueso donde está alojado el tumor y sustituirlo por una prótesis. Esta es una esperanza para que Danna conserve la pierna, pues ya con la pérdida del cabello se deprimió.
La prótesis cuesta 219 mil pesos, cantidad que le es imposible juntar a la familia de Danna, pero con la solidaridad de todos esperan lograrlo.
La niña es originaria de El Walamo. En esa comunidad las han apoyado con lo que pueden para medicinas, tratamientos y para ir a Culiacán a recibir los tratamientos.
La familia abrió la cuenta 4169-1604-7265-4582 de Bancoppel y han empezado a recibir donativos.
Danna Gisela le pide a los mazatlecos su aportación. No importa cuál sea su partición, pero que depositen. “Con la solidaridad de todos le pueden hacer el mejor regalo: recuperar su salud.”
A través de su cuenta de Facebook, Danna Gisela hizo un llamado de auxilio en su comunidad que ya tuvo respuesta. Ahora solo espera la cooperación de los sinaloenses y mexicanos.
