Cosalá, Sinaloa.- El pueblo mágico de Cosalá desde hace meses no reportaba violencia, y dicha racha concluyó ayer, cuando presuntamente un adulto mayor mató a su hijastro y a su nuera en la comunidad de Palo Verde.
Los occisos respondían a los nombres de Filiberto N., de 68 años de edad; Blanca Estela N., de 24 años; y Joaquín Adrián N., de 21 años de edad.
Versión establecida de manera no oficial establece que la tarde de ayer, en una vivienda de la citada localidad, estaban las tres personas, y por razones desconocidas comenzaron a discutir, hasta que la situación fue subiendo de tono.
De repente, Filiberto, presuntamente empuñando un arma, jaló el gatillo en más de una ocasión para acabar con la vida de su hijastro y con la de su pareja.
Fuentes de seguridad señalaron que, luego del atroz crimen, el sexagenario apuntó el arma en su cabeza y también decidió terminar con su existencia.
Los habitantes, al ver lo que sucedía, llamaron a las autoridades policiales para ponerlas al tanto de la situación. Cuando llegaron, agentes policiales encontraron los cuerpos dentro de la casa.
La joven pareja estaba llena de sangre, uno encima del otro; mientras que Filiberto estaba tirado bocarriba, a unos metros de distancia. El inmueble fue resguardado para dar paso a los trabajos periciales.
Personal de la Fiscalía General del Estado acudió a dar fe del trágico escenario. Peritos e investigadores se hicieron cargo de las labores de campo para recabar todo tipo de información sobre lo acontecido.
Asimismo, fotografiaron cada indicio para integrarlos a una carpeta de investigación, que durante su desarrollo ayude a aclarar los hechos.
Por último, los tres cuerpos fueron retirados a una funeraria para que les realizaran la autopsia de ley para ser entregados a sus dolientes.
A un costado del adulto mayor quedó un arma corta con la que se presume cometió el doble crimen, pero sería la autoridad competente quien se encargaría de esclarecer el hecho violento.
