Estados Unidos.- Una pareja de esposos podría pasar el resto de su vida en la prisión, después de que la policía encontró a su bebé de 10 meses de edad sin vida, con deshidratación y también una marcada desnutrición, que al cuestionarlos dijeron que no atendieron a la niña por «razones religiosas».
En su cuna falleció la pequeña Mary. Foto: archivo/EL DEBATE
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Ambos padres de 27 años de edad declararon que no llevaron a la menor con el médico por que esperaban un milagro, y de acuerdo a su religión «Dios está por encima de las enfermedades».
Es importante mencionar que la niña no había recibido ninguna dosis de vacunas.
Los hechos se registraron en Michigan en donde ahora la pareja esta acusada de asesinato por felonía y abuso infantil en primer grado por el fallecimiento de la bebé que en vida llevaba el nombre de Mary.
Por ello, los padres identificados como Welch y Fusari aceptaron que su hija se veía muy delgada y con bajo peso, un mes previo a su muerte; pero también admitieron que no buscaron llevarla a recibir los servicios médicos.
Lo anterior fue que sentían temor de que después de ver el estado físico de la niña, en forma inmediata podrían ser enviados a Servicios de Protección al Menor.
Insistieron en el juicio que su actuar fue por “falta de fe y confianza en los servicios médicos, y razones religiosas”, según consta en un documento de la corte.
La policía informó que el padre llamó al servicio 911 para pedir ayuda y cuando acudieron ya estaba sin vida en la cuna. Por ello, la muerte de la menor se atribuye a un cuidado negligente de sus progenitores.
En las redes sociales y en forma específica en su cuenta de Facebook, el padre de Mary escribió sobre la desconfianza hacia los médicos por cuestiones religiosas.
También, en las investigaciones encontraron un video, en el cual pide evitar que los niños sean vacunados, porque “Dios está sobre las enfermedades”.
También calificó a los doctores «sacerdotes del culto médico” y en su casa cuelga letreros sobre la fe en Dios.
La pareja pasará muchos años en prisión y sus dos hijos tampoco están vacunados.
Los niños están bajo la custodia de las autoridades. La mamá de Mary se encuentra en espera de su cuarto hijo.
