Los hechos ocurrieron el pasado 22 de octubre en la localidad de Temozón, Yucatán, donde fueron encontrados los cuerpos de una pareja de ancianos que fueron asesinados a cuchilladas en su domicilio.
Los cuerpos correspondían a Esperanza C. P. y Maximiliano C. C. de setenta y nueve y ochenta y nueve años de edad.
En principio se creyó que se trató de un robo, sin embargo las líneas de investigación cambiaron una vez que las autoridades se enteraron de que el hijo de la pareja se había dado a la fuga.
Otro hecho que apuntó a las autoridades a la búsqueda del joven fue que en el lugar del crimen se encontró sangre correspondiente a la suya, además de sus huellas dactilares.
Conflictos familiares por herencia y dinero fueron, aparentemente, las causas del asesinato y degollamiento.
El Servicio Médico Forense informó que la necropsia realizada a los cuerpos, arrojó que la causa en ambos sujetos fue un choque hipovolémico causado por anemia aguda post hemorrágica secundaria, debido a degüello por arma blanca.
Los cuerpos no presentan marcas producidas por amarres o sometimiento ni huellas de violencia sexual.
Fue gracias a los vecinos, quienes hallaron los dos cuerpos que las autoridades policiales pidieron el apoyo del Instituto de Ciencias Forenses para levantar legalmente los cuerpos y trasladarlos a las instalaciones del SEMEFO, en Mérida.
Por el momento no se ha dado con el paradero del presunto homicida, sin embargo la Fiscalía General del Estado permanece atento a cualquier avistamiento, además de que se ha abierto una carpeta de investigación que permita realizar las indagatorias correspondientes.
