Argentina.- Mujeres y niñas de todo el mundo se encuentran propensas a ser víctimas de abuso sexual. Lamentablemente, en muchos casos los agresores son personas cercanas o que conviven por un tiempo con ellas. Para demostrarlo, el hecho que ocurrió en Río Negro.
Alumnas de sexto grado participaron en una clase de Educación Sexual Integral, en donde trataron temas como los límites que deben tener las personas con el cuerpo de los demás. Al final, el docente les entregó una hoja en donde escribieron sus dudas e inquietudes. Estas fueron leídas por la directora, quien descubrió que el profesor había abusado de por lo menos nueve estudiantes.
Gracias a que reconoció la letra de una chica, la mujer habló con ella personalmente y le pidió que relatara lo que sufrió. Posteriormente hizo lo mismo con las otras víctimas, quienes aseguraron que el docente les pedía que se sentaran en sus piernas mientras calificaba sus libretas.
También les pedía que pasaran a escribir al pizarrón y que escribieran en la parte más alta para que su falda se alzara mientras él tiraba su lapicero o borrador a propósito.
El caso tardó poco tiempo en viralizarse, por lo que las autoridades escolares decidieron suspender al maestro de todas sus actividades. Asimismo, los padres de familia denunciaron lo ocurrido a las autoridades y luego de una investigación se confirmó que todas las declaraciones coincidían.
Las víctimas contaran con apoyo emocional y psicológico para superar la experiencia que vivieron. Hasta el momento se desconoce la condena que enfrentará el responsable.
