China.- Ternura, cariño y amor incondicional son solo algunas de las cosas que las madres de familia entregan a sus hijos. Sin embargo, no todas tienen los mismos sentimientos. Para demostrarlo, el trágico hecho que sucedió en la ciudad de Chifeng.
De acuerdo con información de medios locales, una mujer, cuya identidad aún no se ha revelado, se encontraba desesperada porque tenía varios meses sin poder encontrar un empleo que la ayudara con los gastos del hogar. De igual manera, casi a diario peleaba con su hija, ya que ella usaba la mayor parte del día el celular.
Un día la fémina, llena de coraje, arremetió contra la pequeña, de tan solo siete años de edad, y le quitó la vida. El informe de las autoridades señala que, tras intercambiar palabras, la responsable se dirigió a la cocina, tomó un cuchillo y apuñaló en repetidas ocasiones a la menor.
A pesar de que la víctima trató de escapar, no tuvo éxito pues su madre la tomó del cuello y comenzó a asfixiarla. Al ver a la niña en el suelo, la mujer se arrepintió y decidió acudir a la Policía para confesar el crimen.
El esposo de la asesina trabaja todo el año fuera de la ciudad, por lo que no estaba en casa cuando ocurrió todo. Cuando se enteró de la muerte de su hija quedó devastado y aseguró que quiere una condena justa para su mujer, explicó el Buró de Seguridad Pública de Chifeng.
Hasta el momento se desconoce cuál será la sentencia que enfrentará la responsable.
