Perú.- Un terrible crimen perpetrado en contra de una bebé de nueve meses indignó a la ciudad de Huancayo.
La pequeña fue llevada al Hospital El Carmen, ubicado en la misma zona, donde se mantuvo por seis días en estado grave hasta que finalmente su corazón dejó de latir debido a los contundentes golpes.
Entre lágrimas, la madre acusó al padrastro de la nena, David Eros Aparco Cajacuro, de 23 años, quien, dijo, aprovechó su ausencia para agredir a la bebé, porque no paraba de llorar.
El padre biológico de la menor fue informado de la situación, por lo que al lado de Nelly, la mamá, exigió a las autoridades que David Eros pagara por su delito tras las rejas.
El caso dio un giro cuando David negó todo aquello de lo que lo acusaban, por lo que se consideró una nueva vertiente de la investigación, apoyada por los vecinos y conocidos de Nelly, de dieciocho años.
David acusó a Nelly de haber sido quien golpeó a la bebé, y dijo que lo hacía a menudo alentada por las frustraciones que vivía. Los testigos apoyaron tal versión asegurando que Nelly maltrataba a la menor.
Además, Ismael Tacuri, jefe de pediatría del hospital, reveló que la bebé tenía un traumatismo craneoencefálico muy grave, y que los exámenes que le practicó arrojaron que tenía anemia.
Por si fuera poco, la hermana de Nelly supuestamente vio cómo pasó todo, por lo que ha extrañado al juez del caso que los elementos del Ministerio hayan omitido sus declaraciones, pues podrían ser la clave para comprender qué fue realmente lo que sucedió.