Ciudad de México.- Los bebés menores dos años nunca deben asolearse, aun cuando tengan protección solar, ya que su piel es inmadura y no ha desarrollado las defensas necesarias, por lo que corren riesgo al exponerse a los químicos de filtros y protectores solares.
De igual forma, aumenta el riesgo de desarrollar cáncer de piel a edades tempranas, aseveró Lorena Guadalupe Estrada, jefa de Dermatología del Hospital Regional “Lic. Adolfo López Mateos”, del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).
Otro grupo con prohibición a exponerse al sol son las personas que padecen o tuvieron cualquier tipo de cáncer de piel, ya que al asolearse el riesgo de que la enfermedad se agrave o la vuelvan a desarrollar es muy alto.
Lo mismo sucede con los pacientes que tienen o tuvieron “lupus eritematoso”, pues recibir en la piel los rayos ultravioleta lo puede reactivar.
Recomendaciones si vas a tomar el sol
Utilizar protección química mediante la aplicación de filtros, pantallas y bloqueadores con factor de protección solar de 50 o 50+. El uso correcto de estos productos es aplicarlos cada tres o cuatro horas, capa sobre capa, mientras se esté expuesto al sol en un ambiente seco.
En la playa o albercas se recomienda utilizar filtros solares resistentes al agua y aplicar cada dos horas; retocar el filtro cada vez que salgan del agua y se vuelvan a meter.
No hay que abusar
El sol tiene muchos beneficios, como estimular la producción de vitamina D en el cuerpo humano, necesaria para mantener los huesos sanos, pero asolearse en exceso puede traer consecuencias irreversibles como el envejecimiento prematuro de la piel y el riesgo de cáncer de piel.
Recuerda que la temporada de marzo a septiembre es el periodo de mayor radiación ultravioleta. El 80% de la radiación solar que recibe el cuerpo se adquiere antes de los 18 años, de ahí la importancia de sensibilizar a la población para no sobreexponerse.