Estados Unidos.- Según un reporte realizado en los Estados Unidos por la revista Consumer Reports, el cual se centra en analizar las marcas de agua mineral embotellada que se venden, que seis marcas de agua contienen un nivel de arsénico superior al recomendado.
Entre estas seis se encuentra el agua Peñafiel, la cual es importada desde México a los Estados Unidos, en donde es envasada.
Luego de que la información se hizo pública, la empresa detuvo su producción durante tres semanas y ya revisa sus procesos de filtración, pues los resultados del reporte indicaron que el agua Peñafiel contiene más de 3 ppb (partes por billón) de arsénico, el límite que recomienda la Consumer Reports para el agua embotellada para ingesta humana.
Keurig Dr Pepper, la empresa que está detrás de Peñafiel, aseguró que ya ha hecho exámenes al interior de la empresa, y reconocen haber encontrado concentraciones de arsénico de un promedio de 17 ppb.
El número obtenido por Consumer Reports es de 18.1 ppb, muy por encima de los 10 ppb permitidos por la FDA, y que también es el límite recomendado por la Asociación Mundial de Agua Embotellada.
«Keurig Dr Pepper debe retirar toda el agua Peñafiel que se encuentra actualmente en el mercado y que pueda contener estos niveles de infracción. Si no actúan, la FDA debería obligar a un retiro del mercado”.
El arsénico es un oligoelemento presente en las rocas y los sedimentos, y puede contaminar el agua subterránea de manera natural por fuentes geológicas o por actividades humanas, como la extracción y la escorrentía de fuentes agrícolas e industriales.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, la exposición prolongada a niveles altos de arsénico se asocia con trastornos de la piel y mayores riesgos de ciertos cánceres, diabetes y presión arterial alta.
Algunos estudios también han relacionado el arsénico con el desarrollo intelectual deficiente luego de una exposición temprana en la vida.
El agua Peñafiel ha estado en la mira de autoridades sanitarias por algún tiempo ya: en 2015 la FDA detectó concentraciones de arsénico por más de 10 ppb y esos no son los niveles más altos que el agua mexicana ha alcanzado.
En 2009, en New Yersey, se le señaló de alcanzar hasta los 22 ppb de arsénico.