Guaymas, Sonora.- El organismo de don Leonardo, de 77 años de edad, no resistió la impresión de recibir la noticia de que un familiar suyo estaba privado de la libertad y a punto de ser atacado por sus secuestradores, a menos de que él les depositara una fuerte cantidad de dinero, en una operación de extorsionadores telefónicos.
La historia de este caso se inició poco antes de las diez de la mañana de ayer, cuando don Leonardo se encontraba en su vivienda del sector Centro y de pronto soló el teléfono de casa.
Al contestar, un sujeto con voz amenazante le dijo que tenían secuestrado a un familiar suyo y que lo torturarían a extremo si no les depositada cierta suma de dinero.
Don Leonardo les colgó, pudo contactarse con su familiar “secuestrado” y posteriormente reportó el hecho ante la Policía Municipal.
Cuando patrulleros llegaron a su casa para tomar nota a detalle de este intento de extorsión, encontraron al vecino con hipertensión, taquicardia y ansiedad, de ahí que lo trasladaron a un hospital para que se le brindara atención médica.
