Puerto Peñasco, Sonora.- Momentos de llanto y desesperación sufrió una madre de familia que viajaba como » trampita» con sus hijos de 2 y 5 años de edad, al dejarla el tren luego de bajarse a buscar agua para sus hijos.
Esta mañana de Lunes 30 de mayo, llegó el tren carguero a Caborca aproximadamente a las 08:00 am proveniente de Este a Oeste y en su parada en esta ciudad, una madre que viajaba de «trampita» junto con dos hijos de 2 y 5 años de edad se baja del mismo a buscar agua y no esperando que el tren emprendiera su caminar tan pronto, se da cuenta demasiado tarde quedándose solo mirando como se alejaba y con sus dos menores a bordo.
La señora inmediatamente reacciona e informa a los de la estación ferroviaria de lo sucedido y obtiene un «raite para la central de autobuses a tratar de tomar un camión, pensando que llegaría a Puerto Peñasco primero y esperar a sus hijos allá.
Empleados de Ferromex y Protección Ferroviaria, así como inspectores y tripulación del tren carguero al recibir la notificación vía radio, se abocan a recorrer a lo largo de los vagones en búsqueda de los menores, siendo localizados en uno de los «cajones» vacíos y poniendo de inmediato a resguardo seguro.
Mientras tanto, el Comisario de Seguridad Pública Municipal de ésta ciudad al enterarse de la situación por parte de personal de Ferromex, se traslada con personal policíaco a buscar a la madre, encontrándola en la central de autobuses y enterándose que no había salida hacia Peñasco hasta más tarde.
Por tal motivo y con ayuda de empleados de Ferromex, se avisó al maquinista detuviera su marcha y recibiendo la orden, se justo en el ejido México 68 o mejor conocido como «Los Sapos» mientras elementos policíacos trasladan a la madre que no dejaba de llorar, hasta aquel lugar, donde ya los esperaban empleados de Ferromex con los dos menores a salvo.
Muchas felicitaciones a personal de Ferromex que detuvo el tren aún con lo que la tardanza implica para sus protocolos rigurosos, sin embargo, pensaron que la vida de los menores dependía de ellos y aunado a la angustia y desesperación de la madre que sólo quería darles agua a sus hijos, hicieron humanitariamente lo correcto.
También van las felicitaciones a titular de la corporación policíaca Maestro Gustavo Guevara que movilizó rápidamente a sus elementos designados para tal ayuda y afortunadamente madre e hijos se reencontraron, continuando su camino ahora más seguros hacia su destino.
