Estados Unidos.- En una noticia impactante y trágica, una menor de tan solo 7 años de edad falleció mientras desinflaba los globos de helio que habían utilizado para su fiesta de cumpleaños.
La madre de la menor fallecida, identificada como Alexandra Hope Kelly, compartió la traumática tragedia a través de redes sociales informando que todo sucedió a causa de un gran globo Mylar número 7 de arcoíris inflado con helio que habían comprado para la celebración de la niña.
Si bien, la madre afirma que fue consciente del peligro que representan los globos de látex, jamás imaginó que existiera un riesgo de tal magnitud con respecto a los globos llenos de helio Mylar.
De acuerdo con la mamá, una semana después de celebrar el aniversario 7 de su hija, ambas se encontraban juntas intentando sacar el aire de los globos de repente la menor le preguntó si podía explotar su globo grande 7, a lo que ella respondió que estaba bien.
Poco después la mujer se quedó dormida durante unas horas y cuando se despertó fue a buscar a Alexandra. Al encontrarla pensó que de igual forma había caído dormida, sin embargo, notó que el globo estaba alrededor de su cabeza, por lo que llamó al 911 y comenzó a realizarle RCP.
«Le pedí a los operadores del 911 que me recordaran los pasos de RCP porque había pasado tanto tiempo desde mi última certificación y no quería estropearlo. Un oficial de policía llegó y se hizo cargo de RCP seguido por bomberos y paramédicos».
Pese a la llegada de la policía y agentes de bomberos, los intentos por reanimarla no tuvieron éxito y fue declarada muerta en el lugar, provocando el llanto inconsolable de la madre al no creer la terrible tragedia que enfrentaba.
Hasta ahora se desconoce si Alexandra falleció por asfixia o intoxicación por helio, ya que se encuentran a la espera de los resultados preliminares para la determinación final de su causa de muerte, un proceso que podría tardar entre 4 a 6 meses.
Ante los hechos, la afligida madre hizo un llamado a los padres para crear conciencia de que no sólo los globos de látex son peligrosos, sino también los de Mylar.
«Espero y pido que esto impida y salve la vida de otros niños. No me gustaría que nadie más experimentara el dolor y la devastación que trae la pérdida de un niño».
