Argentina.- El crimen organizado no conoce de límite alguno, mucho menos del respeto hacia los grupos vulnerables, pues este lunes, una pareja de delincuentes decidió aprovecharse de un maestro albañil al que acorralaron y abusaron en un lote baldío mediante engaños en la zona de Quilmes.
De acuerdo con La Crónica, este maestro albañil recibió un mensaje vía WhatsApp con la finalidad de realizar un presupuesto en un inmueble ubicado en el barrio El Jardín.
Dos horas después del aviso, el albañil llegó en su moto a la vivienda ubicada sobre calle Emilio Wierna, donde fue atendido y lo invitaron a pasar hasta el fondo del hogar en donde buscaban construir una habitación.
Una vez instalados en el lugar y con la presencia de tres personas, entre ellas una mujer, el hombre que lo llamó por WhatsApp sacó un arma de fuego y en tono amenazante le pidió una gran cantidad de dinero a cambio de devolverle su moto. Poco después de eso, a punta de pistola fue golpeado, abusado y corrido del lugar.
Andá, buscame 20 mil pesos que si no la moto no te la entrego, yo sé donde vivís, sé todos tus pasos, sabemos que tenés contratos y obras, por eso conseguime el dinero o aquí te dejo”.
En altas horas de la noche de aquel día, el albañil fue contactado por uno de los acusados con la finalidad de tener un punto de reunión para la entrega del dinero y la moto.
Minutos después del aviso, uno de los acusados le envió un audio por WhatsApp en el que informó la cancelación del encuentro para la entrega.
A raíz de esta situación, el albañil decidió hacer la denuncia ante la Fiscalía de Quilmes y con las pruebas en la mano, lograron arrestar a los acusados identificados como Arnaldo Rodrigo Lera de 36 años, José Joaquín Lera de 34 años y Adriana Gutiérrez de 30 años.
En la investigación se reveló que Arnaldo Lera tenía el arma con la que había intimidado al trabajador para conseguir el dinero mientras que José Lera y Adriana Gutiérrez prestaban servicio en el Servicio Penitenciario de Quilmes.
En la primera audiencia de imputación, los tres acusados fueron señalados de los delitos de robo doblemente agravado por el uso de arma de fuego, abuso sexual y banda delictiva; su condena asciende a los 22 años en el penal de Quilmes.
