Guaymas, Sonora.- Algunos vehículos utilizados para la distribución de gas LP o butano observan un pésimo estado, tanto en la estructura de la unidad misma, como en los equipos que portan, principalmente aquellos que surten tanques estacionarios, lo que pone en riesgo a la población.
Para muestra recibimos el reporte de la señora Patricia C., quien menciona que serían las seis de la tarde del jueves cuando se encontraba a bordo de su vehículo en compañía de sus menores hijos, justo a la entrada al fraccionamiento Fovissste.
De pronto un vehículo de la empresa Pagasa terminó de surtir un tanque estacionario y cuando su chofer se disponía a retirarse, de pronto estalló la manguera de abastecimiento y comenzó a formarse una nube blanquizca con el gas que escapaba.
Las personas que estaban en el sitio se alarmaron y comenzaron a correr en varias direcciones, cuando el mismo chofer se bajó del vehículo, cerró la válvula y luego se retiró como si nada.
La señora Patricia expone: “¿Qué acaso no hay una comisión que inspeccione a esas empresas que manejan esos elementos tan peligrosos?… Deberían de ser más estrictos antes que ‘ahogado el niño, quieran tapar el pozo’».
