Guaymas, Sonora.- Para María la ley se hizo para violarla, y cuantas más veces se pueda es mejor, pues se atiene a que si no existe flagrancia en la comisión de algún delito, no puede ser detenida por la policía; ya agarró a martillazos a su anciana inquilina y continúa con su postura de ataque y de meterse a la vivienda en renta cuantas veces se le pegue la gana.
OPINION SONORA publicó cuando esta brava mujer el pasado miércoles allanó el domicilio de la abuelita María del Carmen del Cid, armada con un martillo, con el cual destrozó el candado de la reja de acceso y así golpeó a la inquilina en la cabeza, para ocasionarle tres heridas en el cuero cabelludo y dejarla inconsciente.
La mujer herida fue atendida inicialmente por paramédicos de Cruz Roja y llevada al Hospital General, pero a la agresora no la detuvieron los elementos de la Policía Municipal por no haberla encontrado en franca flagrancia, como dice la ley.
Pero los ataques han continuado contra María del Carmen del Cid y su esposo, también de edad avanzada, en un problema que se origina porque la mujer que les renta está empecinada en que parte del arrendamiento incluye que a ella le tienen que pagar su consumo eléctrico, pues las dos viviendas contiguas se alimentan del mismo medidor.
Anoche se amonestó de nuevo a María, pues quiso allanar de nuevo la casa que le tiene rentada al matrimonio de abuelitos, llegó la policía, alegaron y la conminaron a conducirse con respeto.
Pero como la pareja decidió irse esa noche a casa de una hija, ello fue aprovechado de nuevo por la mujer para violentar el candado, robar la cadena y provocar desorden al interior de la vivienda.
Y como de nuevo un hubo flagrancia, es decir, no se le sorprendió en el acto, tampoco la Policía Municipal no la pudo arrestar.