Empalme, Sonora.- Los camiones de pasaje, concesionados para dar servicio a las comunidades rurales del Valle de Guaymas-Empalme de plano están en deplorables condiciones, que ponen en riesgo la integridad física de los usuarios, por lo que es urgente la intervención de inspectores de la Delegación Regional del Transporte del Estado.
Para muestra pusieron de ejemplo el autobús número 26, cuyos asientos están rotos, bastante sucio, tiene numerosos vidrios rotos y para colmo la puerta de emergencia está cerrada con candado.
Un usuario nos escribe: “El estado deprimente en que se encuentran varios camiones del servicio público, que cubren la ruta Empalme, La Misa, Ortiz, Santa María, La Atravesada, y todo el valle de Empalme y Guaymas, los asientos en estado insalubres, el aseo, mucha basura, vidrios rotos, puertas que son salidas de emergencia bloqueadas o con candado”.
Agregó que la tarifa que cobran no es nada reducida, son 30 pesos a La Palma y La Atravesada, 35 al Santa María y 50 hasta La Misa, por lo que fácilmente los concesionarios podrían mejorar sus unidades o cambiarlas por modelos más nuevos, que garanticen seguridad y comodidad para el pasajero.
