Argentina.- Priscila, una niña de cuatro años murió quemada por su madre, cuando en compañía de su actual pareja planearon vengarse de su ex esposo; por lo que la asesinaron a golpes, la bañaron con kerosene, le prendieron fuego y arrojaron sus restos en el Arroyo Las Conchillas de Beraztegui.
Los testimonios de los hermanos de la niña dan detalles de como sucedió el homicidio de la pequeña por parte de su mamá Silvana «N», que junto con el padrastro de la niña de nombre Pablo «N», planearon como desaparecer a Priscila, para molestar a quien era el padre biológico de ella Gabriel «N».
Las declaraciones de los niños recrean lo ocurrido en el año 2014 durante el juicio contra Silvana «N» y Pablo «N», quienes tienen cuatro años en prisión preventiva después de que fueron detenidos como probables homicidas.
Las familias paterna y maternal de Priscila ya declararon en los tribunales, pero lo más escalofriante fue escuchar a los dos hermanitos de Priscila, como sucedió el asesinato.
El niño mayor de nombre Eduardo «N» relató que el día del homicidio de su hermanita, su madre lo envió a comprar cinco litros de kerosene, y conoció que con ese líquido iba a quemar a la niña.
Entre lágrimas recordó como Silvana «N» lo amenazó y si decía algo lo iba a quemar a él también.
Su otra hermanita de nombre Cinhia enuméro las golpizas que recibía Priscila de su madre, y que eran muchisimas que por cualquier cosa era golpeada.
La investigación ha llevado a concluir que el caso de la niña de cuatro asesinada por su madre y padrastro obedece a un caso severo de maltrato infantil, y que cada golpe que le daban a la pequeña era en venganza y odio que tenía a su ex esposo Gabriel «N».
Las autoridades han calculado que los presuntos homicidas tardaron en quemar a la niña de tres a cuatro horas, y los restos los cubrieron con una cobija para tirarlos en el agua y no ser encontrados.
El plan de la madre no salió como esperaba y ahora están por recibir una condena máxima.