Guaymas, Sonora.- Como en todo oficio o profesión, por más humilde que sea, hay quienes ejercen su trabajo con dignidad, responsabilidad y alta calidad humana, como es el caso de un servidor público, que esta tarde recibió un agradecimiento así: “Si todos los policías fueran como tú, mi niño, otro Guaymas sería”.
Y es que un elemento de las filas de la Policía Preventiva Municipal vio a una abuelita que batallaba para cruzar en silla de ruedas la avenida Serdán, a la altura de la calle 19, y sin pensarlo dos veces detuvo la marcha de la patrulla, encendió la torreta a manera de prevención y se bajó a auxiliar a la abuelita.
Los problemas para la mujer de edad avanzada se terminaron en este esfuerzo, pues el uniformado – de quien desconocemos su identidad – llevó a la abuelita hasta la banqueta y la colocó en un lugar seguro.
Agradecida por tan noble gesto, la mujer dibujó una sonrisa en su rostro y tomando la mano del policía, le dijo: “Si todos los policías fueran como tú, mi niño, otro Guaymas sería”, y lo despidió con una señal de bendición.
El elemento policiaco, satisfecho de una acción más en bien de la ciudadanía, regresó a su patrulla y a continuar con el servicio de vigilancia asignado.
La mujer agradecida con esta acción se dedica a la venta de boletos en la banqueta del negocio B-Hermanos, justo en ese crucero del centro de la ciudad.
