España.- A través de redes sociales, estudiantes de un instituto de Granada, en España, difundieron videos de un nuevo reto viral al que llaman «El Juego de la Muerte», que consiste en asfixiar a un compañero hasta que quede inconsciente.
La Policía Local de esta provincia andaluza ha informado a las familias del peligro del nuevo reto, que puede derivar en convulsiones, dejar al oxígeno sin cerebro, provocar daños neuronales irreparables e incluso la muerte.
«Hemos estado en un IES -Instituto de Educación Secundaria- de #Granada porque hemos detectado a menores de ESO grabándose con el móvil y subiendo a RRSS el reto #JuegoDeLaMuerte (ahorcar a alguien hasta la inconsciencia). Padres y madres, revisa sus móviles y advertirles del peligro», escribió el cuerpo de seguridad local.
❗❗ ¡ATENCIÓN! Los peligros de un nuevo #RetoViral, el #JuegoDeLaMuerte | Más info y vídeo completo ▶️https://t.co/6FxPI8rGHd pic.twitter.com/GloCD078Jd
— Gustavo Hervas (@GustavoHervas) May 29, 2019
Además de poner en conocimiento de los padres y madres la popularidad de «El Juego de la Muerte», la policía publicó uno de los videos grabados por los alumnos, que estudian niveles de segundo y tercero de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) -entre 13 y 15 años-.
Si «quien juega con juego puede acabar quemado», quien juega con la muerte puede terminar matando a alguien. Dejar sin oxígeno un cerebro puede ocasionar convulsiones, daños neuronales irreparables e incluso la muerte. Esto no es ningún juego ni tiene ninguna gracia», escribieron las autoridades junto a las imágenes.
Según pudo saber el diario Europa Press, la policía ya visitó el centro en el que se habían grabado los videos, para hablar con el director. El responsable del IES dijo a los agentes que «ya había escuchado algo», y convocó una reunión con los alumnos para explicarles «las graves consecuencias» del reto.
Hasta este momento, «El Juego de la Muerte» sólo se ha detectado en Granada, aunque los agentes continúan en alerta por si el juego se extendiera en otros puntos del país. También mantienen el contacto con la Fiscalía y con la dirección del instituto.
