Los Ángeles.- El sismo de magnitud 6,6 que sacudió este jueves una gran zona del sur de California y partes de Nevada, generando nerviosismo y provocando algunos daños en un poblado cercano al epicentro, no está relacionado con la falla de San Andrés.
Lucy Jones, sismóloga del laboratorio de sismología del Instituto de Tecnología de California (Caltech), dijo que el terremoto del jueves fue el más fuerte desde que uno de 7,1 azotó el área el 16 de octubre de 1999.
De acuerdo con información de AP y El País, la sismóloga, tuiteó poco después del terremoto de este jueves que no se trataba de la falla de San Andrés.
La aclaración es pertinente porque la preocupación popular es que cualquiera de estos terremotos pueda provocar un movimiento en la falla que desencadene el big one. La falla de San Andrés tiene tensión acumulada para provocar un terremoto en cualquier momento entre ahora mismo y los próximos 100 años.
Temen que la falla de San Andrés desencadene el llamado “big one”
El terremoto se produjo muy cerca de la superficie, explicó Jones en una conferencia de prensa, lo que explica que se sintiera tan lejos del epicentro. Jones dijo que el temblor probablemente ha producido una ruptura en la superficie.
Una hora después del terremoto los sismólogos aún no habían llegado a Ridgecrest para comprobarlo. Jones añadió que la magnitud en la zona de Los Ángeles había sido alrededor de 3.0, por lo que era «extremadamente improbable» que hubiera daños en estructuras.
De acuerdo con información de AP, el movimiento telúrico se registró a las 10:33 de la mañana en el desierto de Mojave, a unos 240 kilómetros (150 millas) al noreste de Los Ángeles, cerca de la localidad de Ridgecrest, California. Fue el más fuerte en la región en 20 años.
Peggy Breeden, alcaldesa de Ridgecrest, una población de 28.000 habitantes, dijo que los bomberos trabajaban para apagar cinco incendios, pero que desconocía si se habían reportado lesiones.
Los trabajadores de las empresas de servicios públicos evaluaban las líneas de gas afectadas y estaban cortando el suministro donde se requiriera hacerlo, dijo Breeden a la cadena CNN.
Indicó que el centro local para adultos mayores realizaba un evento por el 4 de julio cuando sobrevino el terremoto y todo el mundo salió a salvo, con nerviosismo, pero sin lesiones.
Entre las réplicas hubo una de magnitud 4,5, según el Servicio Geológico de Estados Unidos.