Ciudad Obregón, Sonora.- Transcurría la tarde de manera tranquila en la Comisaría de Esperanza, municipio de Cajeme, cuando se pronto vino el sobresalto al escuchar una serie de detonaciones con arma de alto poder; era un solitario sicario que dio muerte a balazos al propietario de un taller mecánico y a su ayudante.
Como sucede casi siempre, elementos de la Policía Preventiva Municipal llegaron unos minutos después de la agresión armada y se encontraron con los cuerpos ensangrentados de Marco Antonio, de 67 años de edad, propietario del taller, y de su trabajador Julio César, de 31 años.
Inmediatamente solicitaron la presencia de paramédicos de Cruz Roja, quienes certificaron que ambas personas ya se encontraban sin vida.
Testigos de los hechos indicaron que un sujeto arribó al taller, algo le preguntó al propietario del mismo y sin más comenzó a dispararle, para luego hacer lo mismo con el ayudante, y luego se retiró del lugar.
El área fue resguardada por elementos policiacos y de esta manera peritos de la Fiscalía General de Justicia del Estado procesaron la escena y ordenaron que los dos cuerpos fueran trasladados a las instalaciones del Servicio Médico Forense (SEMEFO).