Tlaxcala.- Un menor de tres años fue trasladado de emergencia al hospital tras haber ingerido un raticida de manera accidental. Lamentablemente en ese momento no estaba al cuidado de nadie para que el terrible hecho se evitara.
De acuerdo con información de El Sol de Puebla, Los padres del menor, identificados como Mónica y Luis Fernando N, ambos de 20 años de edad, señalaron que su hijo se encontraba jugando en el patio de su vivienda, ubicada en el municipio de La Magdalena Tlaltelulco, en el estado de Tlaxcala, donde estaba un pan remojado envenenado para matar roedores que había sido colocado por la abuela paterna del pequeño.
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Al haberse percatado de que el niño había mordido el pan, solicitaron el apoyo de cuerpos de socorro. El veneno ingerido, de acuerdo como lo cita dicho portal, no está permitido para su venta en el país, por lo que en Tlaxcala no había ningún medicamento para constrarrestar sus efectos.
Sin embargo fue por vía aérea, en un helicóptero de la vecina entidad poblana que fue llevado al Hospital Juárez de la Ciudad de México para que recibiera la adecuada atención médica.
Hasta el momento se sabe que el estado de salud del pequeño Elías se encuentra grave.