Empalme, Sonora.- Tras los hechos violentos registrados la tarde de este sábado en el sector Moderna, cuando varios ‘motosicarios’ dispararon contra el cortejo fúnebre que trasladaba el cuerpo sin vida del jovencito que fue ejecutado poco antes de la media noche en el sector Belllavista, dejó como saldo dos personas heridas y una mujer muerta, quien era la madre del difunto que llevaban al Panteón Municipal para darle el último adiós.
Aurelia Padilla, de 33 años de edad, con domicilio en la colonia Pitic, fue ejecutada a balazos cuando trasladaban el cuerpo de su casa hasta el Panteón Municipal y justo cuando pasaron las gasolinera Maytorena, ubicada en la calle Miguel Hidalgo y Costilla, observó a los sicarios y al parecer les reclamó su presencia, pero lejos de retirarse descargaron sus armas contra la madre del difunto, quien quedó sin vida en el lugar y sin poder darle el último adiós a su hijo, Carlos Francisco, alias ‘El Chapatín’, de 16 años de edad.
Uno de los presentes en el cortejo fúnebre que es amigo cercano a la familia, comentó que era algo lamentable y de toda la vida que había vivido en Empalme, jamás se había sentido el ambiente de violencia que tenemos en este tiempo, además agregó que Aurelia no pudo despedir de su hijo pero al menos lo reencontrará en el cielo:
«Su madre no pudo darle el último adiós, pero se reencontrarán en el cielo»
En el lugar se vivió un ambiente de pánico, pues todos corrían a esconderse y tras consumar el ataque los sicarios se retiraron, mientras que el cuerpo de la madre quedó tendido en medio de la calle justo frente al féretro donde se encontraba los restos mortales de su hijo.
Corrió la versión de que supuestamente iban para llevarse el cuerpo, pero el hecho fue desmentido por testigos, ya que dijeron que si hubieran querido ir por el muchacho nada se los hubiera impedido.
Además en el ataque resultaron dos personas heridas, quienes fueron identificadas como Francisca y Manuel, quienes fue trasladados al Hospital del Seguro de Empalme y tras pedir apoyo de elementos policiacos de los tres niveles de gobierno, serían llevados al Hospital General de Guaymas, bajo un impresionante dispositivo de seguridad.