Mérida, Yucatán.- Ligia Kantun, una enfermera con 40 años de servicio, fue víctima de un ataque cuando estaba a punto de abordar su automóvil, tras salir de una agotadora jornada en el hospital del Sector Salud, donde labora; un hombre le lanzó café caliente y la señaló de estar infectada del COVID-19.
Como ella, en diversas partes del territorio nacional, médicos y personal de enfermería han sido blanco de este tupo de ataques, algunos incluso a golpes.
Relata la afectada que estaba a punto de abordar su auto “cuando escuché a un hombre, después sentí muy caliente en mi espalda… me había lanzado un café», mientras el sujeto la señaló de ser portadora del coronavirus.
“Después de que pasó yo me sentí con el coraje y el sentimiento; lo único que yo escuché fue: ¡Infectada!», dijo, al señalar que es la primera ocasión que le sucede una situación de este tipo en su carrera como enfermera.
«No entiendo sus motivos, nosotros estamos ayudando a la gente en esta pandemia, ponemos todo lo que está de nuestra parte para salvar vidas», reveló.
