Yucatán.- Una mujer embarazada denunció que policías de Yucatán la ‘levantaron’ a ella y a su esposo para golpearlos y acusarlos del asesinato de un policía de Progreso, quien fue degollado en la calle, y los golpes fueron tan fuertes que provocaron que abortara.
Agregó que luego de ser detenida, fue golpeada y torturada para que confesara ella y su esposo su culpabilidad en el asesinato del oficial.
La víctima, quien es hija de un empresario pesquero, dijo que por los golpes que recibió su bebé de dos meses de gestación murió y ello le causó que abortara.
La afectada comentó que el pasado miércoles, a las 03:00 de la madrugada, su esposo fue a comprar jugo a un Oxxo ubicado a unas cuadras de su casa y en el camino se encontró a un amigo al que le dio un aventón.
Al llegar al Oxxo, su esposo vio que olvidó el dinero para pagar y regresa a su casa junto con su amigo, pero al llegar, lo rodean cuatro patrullas municipales y los bajan a golpes de la camioneta.
Al escuchar ruido, ella salió y vio que policías estaban golpeando a su esposo y revisando su camioneta, por lo que empezó a grabar en video los hechos, pero también fue detenida y golpeada.
A pesar de que le comentó a los agentes que estaba embarazada, no la escucharon, incluso le pegaron en el vientre y la llevaron a la comandancia de Progreso, esposada donde continuaron golpeándola.
Al ver cómo iba y constatar la forma en que la detuvieron, agentes de la Fiscalía de Yucatán indicaron que fuese puesta en libertad, aunque su marido siguió en la cárcel, acusado de asesinato.
La afectada comentó que ya interpuso las demandas correspondientes en contra de los responsables por secuestro, tortura, fabricación de pruebas y por el asesinato del bebé en gestación.
