Hermosillo, Sonora.- Apenas Sonora pasó en el semáforo epidemiológico de rojo a naranja, y las autoridades de Hermosillo y Guaymas anunciaron la reapertura de sus playas, Bahía de Kino y Miramar lucieron atestados de paseantes, aun cuando el riesgo de contagios por COVID-19 es todavía sumamente alto.
Por cuatro meses permanecieron cerrados estos balnearios, en donde la policía realizó múltiples arrestos administrativos por desacato a las disposiciones tomadas en medio de la aún vigente contingencia sanitaria.
Ayer domingo desde temprana hora lució llena la carretera estatal 100, que conduce a Bahía de Kino, lo mismo aumentó el tráfico vehicular por la avenida Alvaro Obregón, hacia el balneario El Veneno, en Miramar, Guaymas.
Es una situación polémica, pes mientras Sonora se encuentra entre los Estados con riesgo de alto contagio, con decenas de fallecimientos diariamente a causa del COVID-19, con hospitales atestados de pacientes y una alta demanda de oxígeno para la atención tanto domiciliaria, como en nosocomios, se abren las playas para esparcimiento.
Lo mismo sucede en el comercio, ante el deterioro económico, en gimnasios, barberías, estéticas h aginos otros lugares de recreación.