Hermosillo, Sonora.- Para promover la sana convivencia y demostrar sus habilidades en situaciones de riesgo, más de 80 elementos de la Policía Estatal de Seguridad Pública (PESP), Policía Municipal, Agencia Ministerial de Investigación Criminal (AMIC) y Grupo Operativo Táctico (GOT), participaron en la Competencia Estatal de Tiro de Combate 2019.
El secretario de Seguridad, David Anaya Cooley, destacó que esta competencia forma parte de los festejos del Día del Policía, en el cual se hermanan las instituciones policiales bajo la primicia de la medición y la mejora de habilidades esenciales a la función policial.
“Con el objetivo fundamental de hacer de la mejora en las habilidades del policía parte fundamental de la actividad, reflejándose esto en la salvaguarda de su integridad física y la de la ciudadanía; les deseo el mejor de los éxitos y que gane el mejor”, expresó.
En esta competencia participaron 14 elementos de la PESP, 58 policías municipales de Nogales, Hermosillo, Cajeme, Caborca, Agua Prieta, Plutarco Elías Calles, Cananea, Huatabampo, Guaymas y Puerto Peñasco, seis de la AMIC y tres del GOT de Hermosillo.
Juan Miguel Arias Soto, director general del Instituto Superior de Seguridad Pública del Estado (Isspe), expuso en esta ocasión las actividades de la competencia que se realiza cada año con elementos de las diferentes corporaciones que se han capacitado en las instalaciones del Instituto en el “pueblo fantasma”, área táctico policial, para calificar las habilidades de los elementos.
“Además de la convivencia buscamos que el policía cada día se capacite más y esté preparado para lo que pueda venir; es lo que buscamos que compartan entre ellos las experiencias que han vivido de tal forma que esto nos sirva para que sean cada vez más profesionales en su servicio”, aseguró.
José Calixtro Acuña Carrasco, director del Registro Estatal de Armamento de la Secretaría de Seguridad Pública, explicó que los participantes de la competencia se situaron en el contexto de una intervención de una casa habitación en donde hay personas armadas que atentan contra la integridad física del elemento y las personas.
Bajo presión y con capacidad de análisis, los elementos deben identificar entre tirador activo (siluetas que representan a un tirador con arma de fuego) y civiles, efectuar disparos para inhabilitarlos y continuar en cada una de las habitaciones.
Al finalizar el recorrido en la parte interior, dijo, se encuentran con una escopeta que tienen que preparar y habilitar para disparar sobre siluetas metálicas y concluyen disparando un arma larga, haciendo un disparo de precisión que pone a prueba la capacidad y condición física del elemento para contener la respiración y aplicar la técnica correcta y eficiente para hacer su disparo preciso.
En el circuito, los jueces evalúan la capacidad para la toma de decisiones bajo presión, la habilidad y metodología aplicada al servicio de la protección de su vida y la de los ciudadanos.