Empalme, Sonora.- Como coloquialmente se dice, los transportistas, en este caso los que se dedican al acarreo de material pétreo, andaban ‘pateando un bote’, pues no había actividad, ni obra pública ni privada, pero la situación empieza ya a cambiar.
Todo estaba paralizado a raíz de la pandemia del coronavirus, a tal grado que los operadores de unidades optaron por buscar otro empleo, pero igual les fue mal, porque en todos los sectores productivos era o es la misma: no hay trabajo.
Las familias de los operadores y los propios concesionarios enfrentan muchas carencias en estos momentos, porque mientras todo se encuentra paralizado no tienen ingresos, y por tanto no hay para comer en sus casas.
José Ángel Mayorquín Carrillo, secretario general de la CTM en Empalme, y secretario de Transporte de la misma central, manifestó que la situación es realmente muy difícil, pero afortunadamente se empieza a reactivar la obra, en este caso la pública.
Dijo que la obra de rehabilitación de la carretera de la colonia Ladrillera, y otra más de recarpeteo en el valle, reactiva parcialmente la actividad, en este caso de acarreo de material pétreo, lo viene a ser un aliciente para el sector.
Si bien es cierto no son obras muy grandes, pero al menos va a generar empleo en el sector transporte, y eso es lo que se necesita, que poco a poco la actividad se reactive, precisó.
