Ciudad Obregón, Sonora.- En un llanto de sumó dolor la señora Trinidad Félix se aferraba a los ataúdes mientras gritaba: «Dios Mío que dolor tan grande me mandaste» a la vez que miraba al cielo y entre sollozos añadía aquí están mis hijos.
Los agentes de la Policía Municipal ayer sábado fueron encontrados sin vida en calles de la colonia Valle Verde luego de que fueran privados de su libertad y ahora se encuentran en la casa de sus respectivos padres.
El funeral se celebra por la calle Gabriel Leyva en la zona urbana de Pueblo Yaqui donde asisten en estos momentos reunidos los familiares, esposas e hijos de los oficiales José de Jesús, Marco Antonio y Carlos Armando López Félix, quienes de forma constante lloran la irreparable pérdida.
Fue hoy domingo 9 de junio a las 7 de la mañana que los féretros fueron depositados en las afueras de la casa de sus respectivos padres donde se celebra el doloroso funeral.
Será en la capilla de la citada comunidad donde se celebrara la misa de cuerpo presente para luego ser sepultados en el panteón de la citada comisaria previo honores a celebrarse en el edificio de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal
Descanse en paz.
