En redes sociales va creciendo una historia conmovedora de dos pequeñines en un jardín de niños, que fueron observados tomados de la mano y hablándose al oído, en lugar de brincar, correr y juguetear con el resto del grupo escolar… la escena era inusual, rara y hasta para pensar mal, pero terminó en una conmovedora historia.
Maribel nos platica: “Me tocó ir a un Jardín de Niños a unas platicas en el lugar, pues estoy haciendo mi servicio, y cuando venía el grupo de niños, dos en particular llamaron mucho mi atención”.
Agrega que “un par de niños venía tomado de la mano, uno de ellos le venía hablando al oído al otro, y lo venía guiando; conforme se fueron acercando me percaté de la realidad: Uno de ellos era invidente (ciego), el otro niño le venía guiando su camino”.
El niño normal le decía: Ya vamos a entrar al salón, ten cuidado con el escalón, por aquí, vas bien”, después de que ellos entraron, una de las maestras nos comentó que así es siempre, él es su mejor amigo, y siempre está con él en todo momento, jugando, riendo y platicando”.
Maribel dice que “sinceramente me asombró muchísimo y no pude evitar tomarles una foto, porque me pareció algo maravillo, muy tierno”.
Muchas de las veces nosotros creemos que podemos tener a muchos amigos a nuestro lado, por el simple hecho de que nos sonríen o nos dicen un hola, pero realmente a muy pocos los podemos considerar como tales conforme pasa el tiempo y sus acciones que hacen, así como también este niño demostró que todos somos iguales, todos somos humanos, todos somos personas y todos tenemos sentimientos, por eso mismo debemos aceptar a todas las personas tal y como son sin etiquetarlas, comenta Maribel.
Para terminar asienta: “Cada quien tendrá una reflexión diferente de esta imagen y de estos niños, en lo personal, a mí me dejó muy en claro el significado de la amistad, de la hermandad, de no juzgar ni mucho menos etiquetar círculos sociales, pero sobre todo, y lo más importante, la humildad”.